Miguel Aceves Mejía

Cuando El Destino

Miguel Aceves Mejía


No vengo a pedirte amores, 
ya no quiero tu cariño, 
si una vez te amé en la vida 
no lo vuelvas a decir, 
me contaron tus amigos 
que te encuentras muy solita 
que maldices a tu suerte 
porque piensas mucho en mí.

Es por eso que he venido 
a reírme de tu pena, 
yo que a Dios le había pedido 
que te hundiera más que a mí. 
Dios me ha dado ese capricho 
y he venido a verte hundida, 
para hacerte yo en la vida 
como tú me hiciste a mí.

Ya lo ves cómo el destino 
todo cobra y nada olvida, 
ya lo ves cómo un cariño 
nos arrastra y nos humilla.

Qué bonita es la venganza 
cuando Dios nos la concede; 
ya sabia que en la revancha 
te tenía que hacer perder, 
ahí te dejo mi desprecio 
yo que tanto te adoraba 
pa' que veas cual es el precio 
de las leyes del querer.